Hablar de SEO y SEM es hablar de Google, el buscador que acapara de manera insultante la mayoría de las búsquedas que se hacen hoy en día en Internet. SEO siglas de Search Engine Optimization, parece que se ha convertido en la gallina de los huevos de oro para cualquier informático, vender la posibilidad de aparecer en la primera página de Google tiene el suficiente atractivo para cualquier empresa o negocio, como para ser una elemento imprescindible y un argumento de venta en cualquier oferta económica.
Pero claro, la primera página de Google apenas cuenta con poco más de una docena de resultados de búsqueda adornados con una serie de enlaces patrocinados que ocupan las primeras y últimas posiciones de la página, y aquí queremos estar todos, en la famosa primera página de Google. Algunos lo pueden conseguir mediante un buen trabajo de SEO, otros a pesar de hacer un buen trabajo de SEO no serán capaces de superar a otras páginas que llevan años y una gran ventaja sobre los demás, son grandes portales sobre un sector, con un valor y posicionamiento de marca incalculabre. Para aparecer al lado de estas páginas no tenemos otra posibilidad de echar mano del SEM y rascarnos el bolsillo en la compra de publicidad de Google Ads (Google Ads Words).
Está claro el objetivo y tenemos claro que en apariencia si queremos que nos encuentren por un término (o varios términos) de búsqueda primero intentaremos aparecer por SEO. Mientras lo intentamos si tenemos prisa podemos conseguirlo mediante SEM. Una posible tercera vía es fijarnos en las páginas que salen en los primeros puestos muchas de ellas son a su vez directorios sectoriales o locales que permiten encontrar nuestra web indirectamente.